PRESENTACIÓN
La vida de Juan Rulfo oscila entre el mito (creado por el mismo) y la realidad: según sus propias palabras nació en 1917 en Apulco, aunque el acta de nacimiento dice Sayula, Jalisco. Vivió parte de su niñez en un pueblo llamado San Gabriel, ante la muerte de sus padres (su madre en 1927 y su padre en 1923) es internado en un colegio de Guadalajara.
Una huelga en la Universidad de Guadalajara le impide inscribirse en ella y decide trasladarse a la ciudad de México, tampoco puede revalidar los estudios hechos en Jalisco y no puede ingresar a la UNAM, pero asiste como oyente a varios cursos en la Facultad de Filosofía y Letras.
Durante buena parte de las décadas de 1930 y 1940 viaja mucho a lo largo del país, gracias a diversos trabajos. Sus primeros cuentos son publicados en las revistas América, (Ciudad de México) y Pan (Guadalajara); también se publican por primera vez sus fotografías en la revista América en 1949.
Juan Rulfo obtiene en 1952, la primera de dos becas consecutivas que le otorga el Centro Mexicano de Escritores, Rulfo publicó en 1953 El Llano en llamas (donde reúne siete cuentos ya publicados en revistas e incorpora otros nuevos), en 1955 publicó Pedro Páramo.
Dos libros le bastan a Rulfo para conseguir un prestigio literario que sólo habrá de incrementarse hasta convertirlo en el escritor mexicano más reconocido en el extranjero. La obra literaria de Juan Rulfo no cesa de editarse en español y de traducirse a un sin número de idiomas.
Las dos últimas décadas de su vida las dedicó a su trabajo en el Instituto Nacional Indigenista, donde se encargó de la edición de una de las colecciones más importantes de antropología contemporánea y antigua de México.
En 1980 se publica una colección de sus fotografías, para buena parte del público era la primera vez que veían esta faceta del escritor. En 2001 se editaron dos libros: Juan Rulfo fotógrafo y Juan Rulfo, letras e imágenes, para dar a conocer sus fotografías.
Juan Rulfo falleció en la ciudad de México el 7 de enero de 1986.
Las nuevas generaciones de escritores y lectores no dejan de aproximarse a los libros del autor.
La novela de Pedro Páramo tuvo una larga gestación: Rulfo dijo que la primera idea de la novela la concibió antes de cumplir los treinta años, esto se confirma en dos cartas dirigidas en 1947 a su novia Clara Aparicio, en ellas se refiere a esta obra con el nombre de “Una estrella junto a la luna”. Ya en el Centro Mexicano de Escritores, entre 1953 y 1954 cambia de nombre: “Los murmullos”, aparecen algunos fragmentos de la obra con este nombre en varias revistas.
Cuando aparece la novela en 1955 algunos críticos advierten de inmediato la maestría de Juan Rulfo, pero también hubo quienes se desconcertaron frente a su estructura. Los estudios dedicados a Pedro Páramo son numerosos y se incrementan cada año.
